Es común que, al incorporarse a un nuevo puesto, algunas personas se encuentren con condiciones que no se ajustan a lo que se indicaba en la oferta de empleo. Ya sea por funciones diferentes, jornadas más largas, salario distinto o falta de beneficios prometidos, esta situación puede generar frustración, desmotivación e incluso desgaste emocional.
Sin embargo, antes de tomar decisiones impulsivas, es importante actuar con calma y profesionalidad.
1. Revisa la oferta y tu contrato. El primer paso es revisar la oferta inicial y compararla con las condiciones recogidas en tu contrato laboral. ¿Hay diferencias sustanciales entre lo que te ofrecieron verbalmente o por escrito y lo que estás viviendo?
Si firmaste un contrato que ya reflejaba estas condiciones, será más difícil argumentar una discrepancia, pero si hay incongruencias claras, tendrás una base más sólida para reclamar.
2. Recoge evidencias. Guarda capturas de pantalla de la oferta publicada, correos electrónicos, mensajes o cualquier comunicación en la que se especifiquen condiciones laborales. Esta documentación puede ayudarte a respaldar tu postura si decides hablar con tu empresa o acudir a instancias legales.
3. Habla con tu responsable directo. Solicita una reunión con tu supervisor/a o responsable de recursos humanos.
Sé claro/a pero respetuoso/a al exponer lo que te preocupa. Usa un enfoque basado en hechos y evita acusaciones personales. Muchas veces, puede tratarse de un error de comunicación o una falta de alineación interna que se puede corregir.
4. Escucha la explicación. Escuchar lo que la empresa tiene que decir también es importante. Puede que haya cambios organizativos recientes, malentendidos o incluso una oportunidad para renegociar ciertas condiciones. Si la empresa está dispuesta a encontrar una solución, podrías llegar a un acuerdo satisfactorio para ambas partes.
5. Evalúa tus opciones. Si no hay posibilidad de mejora, plantéate tus siguientes pasos:
- ¿Te compensa quedarte por un tiempo mientras buscas otra oportunidad?
- ¿Prefieres marcharte cuanto antes?
- ¿Puedes optar a otros puestos dentro de la misma empresa?
Valorar estos escenarios con perspectiva te ayudará a tomar la mejor decisión para tu bienestar personal y profesional.
6. Protege tu salud mental. Sentirse engañado/a o insatisfecho/a puede afectar tu motivación y autoestima. Habla con personas de confianza, busca apoyo profesional si lo necesitas y recuerda que tu bienestar está por encima de cualquier puesto.
Aceptar un trabajo que no cumple lo prometido puede ser una experiencia frustrante, pero también es una oportunidad para desarrollar habilidades como la comunicación asertiva y la gestión de conflictos. Resolverlo de manera profesional te ayudará a proteger tu reputación, tomar mejores decisiones y seguir construyendo tu trayectoria laboral con confianza.
¡No te conformes con menos de lo que mereces!
B4work se está convirtiendo en una importante fuente de talento para Zafiro Hotels...
Leer másB4work integrado con Teamtailor está consiguiendo que Cuyna optimice sus procesos de selección...
Leer más